miércoles, 9 de julio de 2014

  Hoy, entre insomnio e insomnio, mi cabeza me ha dejado soñar un ratito contigo.
  Y qué le voy a hacer si me he levantado sonriendo.
  Sé que la gente me diría que parara, que no pensara más en ti, pero no puedo evitarlo.
  ¡Y es tu jodida culpa!
  Por la forma en la que nos miramos cuando me hablas.
  Por esa vez que dijiste mi nombre sólo para sonreírme.
  Por ese día en el que tus ojos dijeron más que cien mil palabras.
  Por como me haces sentir... me gustaría poder hacerte sentir de las misma forma.
 




   Tal vez simplemente estoy loca.